Con nuestra receta de hoy os descubrimos otro secreto de las hermanas tomateras…
Con el buen tiempo, todos nuestros platos se vuelven de un color… Después de dar la bienvenida a los fresones, empiezan a llegar los tomates de verdad, el gazpacho se convierte en un básico para aperitivo, comida y cena, la sandía nuestra fruta para el desayuno y la merienda…. ¿Más pistas? ¿Ya sabes de qué color se trata?
El rojo habitualmente colorea platos refrescantes y ligeros. Hoy un postre, combinación de frutas y helado, ideal para esta temporada!
Ingredientes:
- Mix de frutos rojos triturados: Fresas, frambuesas, moras, grosella…¿Qué más se te ocurre?
- Nata montada, sin azúcar, ya lo añadiremos!
- Nata líquida
- Azúcar, esta vez blanco
- Gelatina en láminas (la puedes encontrar en el supermercado, Mercadona tiene la de su marca Hacendado)
Toma nota de las cantidades: 2 láminas de gelatina y 8 cucharas soperas de los demás ingredientes: 8 del mix de frutas, 8 de nata montada, 8 de la líquida y 8 de azúcar.
Mezcla todos los ingredientes en un recipiente, si quieres ser original, puedes no homogeneizar demasiado el mix, así conseguirás trazas de tonalidades distintas como si de una obra de pintura se tratara.
La gelatina debes ponerla en agua tibia para mezclarla bien con el resto de ingredientes. Coloca la mezcla en un molde y al congelador, nosotras utilizamos uno de silicona y rectangular, para servirlo como si se tratara de una barra de helado. Te recomendamos que como mínimo lo hagas un día antes de utilizarlo y vayas dando vueltas al molde para que todas las caras queden iguales.
Para servirlo, pintamos el plato con chocolate amargo fundido, un corte de mousse y unas frutas para decorar…
Sácalo unos 15 minutos antes de emplatar o bien ayúdale con unos segundos de microondas. Jugando con la temperatura conseguirás que la textura sea la de un mousse y degustar más el sabor de la fruta!